El frío va dando tregua. Desde la pequeña cafetería en la que me reúno con
Valeria Castro (La Palma, 1999) , aún el sol no ha alcanzado su punto más alto. En un principio, me encuentro con la canaria para charlar sobre sus prometedores inicios en la industria de la música. Sin embargo, cuando salgo, casi a la hora del almuerzo, me voy con la sensación de satisfacción que produce hablar sin tapujos. Así, más allá de su brillante faceta musical, Castro también demuestra un enorme compromiso social por el feminismo y la realidad social actual. Por ello, estoy seguro de que ella también se convertirá en una referente, como las que ella misma admira.
Empezaste en 2015, con la canción Let it go, en la que ni siquiera mostrabas tu rostro. ¿Cómo decidiste tomar el paso de subir tus versiones a la red? “Fue algo muy natural. Dije: canto en mi casa, canto en la Escuela de Música (también cantaba en el coro), pero siempre en mi círculo más cercano. Entonces pienso: ‘¿como sería que alguien que no me conoce me viese? A ver qué opina’. Quería saber si cuando me dicen que canto bien no es porque sea mi familia, sino porque de verdad puede que a alguien le guste (risas). Entonces, decidí hacerlo, pero siempre que no me conociesen, porque si me ven la cara dicen ‘ah, es Valeria’, y quería mantener el anonimato para saber lo que pensaba la gente que no me conocía.”
Tienes muchísimas versiones, muchas de artistas que cantan en español, pero también otras en inglés e incluso en francés. A veces, el acompañamiento melódico lo realizas te e incluso te has atrevido a tocar con vasos. ¿Con qué estilo te sientes más cómoda? ¿Y con qué idioma? “Con respecto al estilo no sé, me gusta variar. Al final, me muevo más por referentes que por estilos… En el fondo, los referentes cambian constantemente su estilo y yo creo que alguien que se ciña solo en uno le va a faltar algo, no va a ser totalmente rico musicalmente. Tampoco te podría definir con cuáles me identifico más. Quizás poprock, indie, me encantaría hacer algo de jazz… En cuanto a los idiomas, español. Antes solía cantar más inglés, pero he cambiado en los últimos años el tipo de música que escucho y ya canto todo en español, compongo en español…”
Tu vida ha estado ligada a la música, con tus estudios en la Escuela de Música Insular de La Palma. ¿Qué te han aportado esas enseñanzas? “La Escuela me ha aportado muchísimo. En mi familia no hay mucha cultura de música, más allá de que mi padre y mis abuelos pudiesen cantar, aunque siempre me han apoyado. La escuela, como empecé desde pequeña, parecía mi segunda casa, pues estuve desde los 6 años hasta los 18, cuando me vine aquí, a Madrid. No solo es lo estrictamente musical, sino que con todas las actividades y conciertos que hacíamos se creaba un vínculo mayor.”
El gran descubrimiento de Alejandro Sanz
Ahora estudias Biotecnología. ¿Te gustaría que tu futuro estuviese relacionado más con esta ciencia o enfocada a una carrera musical? “Como siempre, el futuro, y más a nuestra edad, es muy lejano y tampoco hay que tenerlo muy presente [risas]. Por ahora, quiero terminar la carrera y tener siempre esa opción ahí. No quiero tirarme a la piscina sin saber si hay agua o no, sino tener las dos opciones. De todas formas, si tuviese que decir algo ahora (aunque siempre teniendo la carrera), sí que me decantaría por la música, porque es lo que más me gusta.”
El año 2017 fue la fecha en la que te lanzaste al centro del panorama musical emergente. Vamos por partes. Primero, Alejandro Sanz escucha tu versión de una canción suya y te tuitea ‘no le quiten ojo a Valeria’. ¿Qué supuso aquello para ti? “Me acuerdo de ese día nítidamente. No tenía datos en el móvil, y Alejandro Sanz me publicó en Facebook, Twitter, Instagram… Yo solo veía notificaciones, pero no podía entrar a verlas porque no tenía Internet. Pensaba: ‘¿qué está pasando en mi móvil?’ Cuando por fin me conecté y vi todo, lo primero que se me pasó por la cabeza fue ‘¿qué he hecho para merecer esto?’, en el buen sentido, claro. Me planteé cómo había llegado Alejandro hasta mí, y cómo le había marcado para que me hubiera compartido. Es una sensación impresionante. Que alguien tan conocido y al que admiro tanto haga esto, que sepa un poco de mi presencia, es increíble.”
También ese año acudiste a actuar en el Isla Bonita Love Festival, y compartiste escenario con, entre otros, La Oreja de Van Gogh, cuyos componentes también te han elogiado. ¿Qué se siente al actuar delante de tantas personas y con grupos como LOVG? “Para serte sincera, fue un locura. Siempre lo digo. Aunque ahora mismo viva un poco de las redes, yo siempre disfruto más y valoro extremadamente más la realidad. Cuando te ves en un escenario tan grande, con artistas como Amaral o La Oreja de Van Gogh y tanta gente que te está mirando… Yo creo que, en el fondo, a alguno le gustó [risas]. Fue una sensación inolvidable, y ojalá volverla a repetir.”
Más allá de las versiones: una artista emergente
Por si fuera poco, llegaste a los oídos del grupo Maldita Nerea y cantaste con ellos en la campaña ‘Las Bailarinas de Bailarina’. Vaya 2017 y qué inicio de 2018. “Ese transcurso de tiempo ha sido alucinante, y aún lo sigue siendo. Creo que últimamente mi vida es como ‘madre mía, cómo aparece esto, qué locura’. Pero qué bien siempre. Pero sí, lo de Maldita Nerea pues… Jorge es un vocalista y una persona extraordinaria, que siempre está dispuesto a ayudarte y a darte consejos. Eso se agradece mucho cuando estás en un tan principio, en una línea de salida de una maratón de mil millones de metros como yo, pero se lo agradeces un montón. Cantar una de sus canciones fue un lujazo.”
Este año pasado, cantaste junto a Beret y otros artistas emergentes en su canción ‘100 Millones de Lo Siento’, un homenaje al cantante por haber alcanzado dicho número de reproducciones. ¿Cómo resumes esta experiencia? “Fue alucinante y, como te comentaba antes, me lo pasé super bien. No era la única que colaboraba, éramos un grupo de gente que partíamos de versionar en Instagram y había gente que no había conocido en persona todavía y tenía muchas ganas de conocer en persona. Fue maravilloso trabajar con ellos, con Beret y con el equipo de Warner Music que son personas geniales.”
Entre tanta y tanta versión, hay canciones tuyas originales, “Nada Malo” y “Una Más”. ¿Tienes en mente seguir componiendo y publicando tus versiones? “Claro, eso siempre está en mente, y aunque no lo publique, porque suelo publicar versiones, estoy componiendo muchísimo. Estoy estudiando por mi cuenta estilos, para probar y experimentar. Espero que pronto. No sé cuando será ese pronto, pero ya podré empezar a sacarlo y mostrarlo a la gente. Al fin y al cabo, eso es tu esencia, aunque pongas tu granito de arena en una versión, tu toque. Tu esencia, lo que sacas desde dentro, está en las canciones que vayas a componer.”
«Hay que luchar por todas, incluso por las que no se consideran feministas»
Siempre te has implicado en la lucha feminista, y así lo has mostrado en tus redes sociales. ¿Cómo ves la situación actual? “Yo siempre trato de luchar desde mi posición lo más fuerte que pueda por la situación de la mujer. Sí que veo que todavía hay muchos problemas. Obviamente, hemos evolucionado, pero es lo de siempre: no puedes pararte porque hayas dado un paso. Tienes que seguir dando pasos para conseguir la igualdad, que es necesaria y que aún no se ha alcanzado. Yo siempre lo intento mostrar, porque como tengo un poquito de voz y alguien me ve, así puedo aportar algo a la causa. Siempre voy a ayudar en todo lo que pueda porque también me afecta a mí. Es mi lucha también, y tenemos que seguir luchando por todas, incluso por las que no se consideran feministas.”
¿Y cómo ves la situación dentro de la música? “A veces se nota en los festivales, por ejemplo, cómo se llenan de hombres, las bandas están compuestas por hombres, los músicos son casi todos hombres… y entonces te da rabia porque parece que no haya talento femenino también. Pero no solo en lo vocal, también en lo instrumental, porque al final todos somos músicos; hay una cultura ‘vocentrista’ en la industria pero también están todos los músicos. En ese sentido, yo echo en falta mujeres, como más mujeres en el cine, en la música; básicamente, hacen falta más mujeres en la cultura. No es una cosa que parta solo de nosotras. Pero creo que tienen mucha culpa los consumidores, quien lleva la industria. Es un problema de todos y que espero que vayamos solucionando. Últimamente se ven muchísimas mujeres y me encanta porque se ven como luchadoras, fuertes. Yo veo a Marta Soto, Vanesa Martín, Natalia Lafourcade; son artistas empoderadas y fuente de mucha inspiración: ‘yo quiero llegar así, como ellas, y demostrarle a la industria y al mundo que también hay un hueco para nosotras’.”
Muchas veces, sorprende que artistas se “mojen” en temas político-sociales, pero cada vez es más común que ocurra en temas como el feminismo. “Si es verdad que ahora con temas feministas, no nos estamos cortando en publicar nuestras opiniones en las redes. Pero eso sí, aunque me informe de feminismo, no voy a ser la que más sepa de ello. Ojalá los medios, o quien pueda, le den también voz a las que realmente han dado su vida al movimiento y puedan informar a la gente de verdad. Soy consciente de que tengo carencias en este sentido y eso es en lo no que se fija la gente. Ojalá no se mediatizaran solo las caras conocidas. Es lo mismo que pasa en política y en otros muchos ámbitos. Hay muchísima mujeres que saben muchísimo más y se merece que les den voz.”
Volvamos al tema de la música. ¿Tienes algún proyecto en marcha? ¿O en mente? ¿Alguna actuación o concierto preparado? “Ahora mismo no tengo ningún concierto programado, aunque me gustaría poder lanzar alguno pronto. En la actualidad estoy componiendo y seguiré versionando. A lo mejor sale alguna cosa que no sé si puedo comentar [risas]. Ojalá siga creciendo mi proyecto musical, que es un trabajo. Me centro mucho en versiones, pero también trabajo mucho en saber en qué voy a ofrecer en un futuro, que espero que sea lo más cercano posible. Quiero estar contenta con lo que haga. No me gustaría sacar algo muy rápido y que luego me pueda arrepentir, sino cosas maduradas con la mejor calidad que pueda.”
Un poco estilo Amaia, ¿no? [risas]. “A mí Amaia me encanta, es toda una referente.”
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Estudio Ciencias Políticas y Sociología en la UC3M y combino mi pasión por los fenómenos políticos y sociales con la cultura, elementos indisociables de una misma y compleja realidad. Desde pequeño me ha encantado escribir y lo utilizo como manera de evasión y difusión.